ChatGPT dejó de ser lo que era: así lo demuestra la última investigación de OpenAI

La inteligencia artificial generativa no solo está redefiniendo el trabajo en las empresas, también está transformando la vida cotidiana de millones de personas en todo el mundo. Un nuevo estudio elaborado por OpenAI en colaboración con el National Bureau of Economic Research, basado en más de 1,5 millones de conversaciones entre mayo de 2024 y julio de 2025, confirma un giro llamativo: el uso de ChatGPT se ha vuelto mayoritariamente personal. Según el informe, alrededor del 73% de las interacciones corresponden a fines no laborales, mientras que solo un 27% se mantiene vinculado con tareas de trabajo. Un año antes, el balance era mucho más parejo, con un 53% de uso personal, lo que refleja el cambio en la manera en que la gente se relaciona con esta herramienta.

Close view of a man with opened AI chat on laptop

Dentro de los usos más habituales, tres categorías dominan la escena: orientación práctica, búsqueda de información y escritura. Estos tres tipos de consultas representan cerca de tres cuartas partes de todas las conversaciones analizadas. Se trata de actividades que abarcan desde pedir consejos para resolver problemas diarios, hasta redactar, traducir o mejorar textos de toda índole. En cambio, los usos más técnicos y especializados, como la programación o las tareas avanzadas de datos, representan apenas una fracción marginal. El estudio muestra que incluso entre quienes emplean ChatGPT con fines laborales, la mayor parte de las interacciones se concentran en edición, traducción y resumen de documentos, tareas que antes requerían mucho tiempo y que ahora se pueden resolver en minutos.

Los datos también revelan un cambio importante en el perfil de los usuarios. A mediados de 2025, los nombres típicamente femeninos superaron el 50% entre aquellos que pueden clasificarse por género, un salto notable frente al 37% registrado en enero de 2024. Esto sugiere una mayor equidad en la adopción de la tecnología, con más mujeres utilizando ChatGPT como herramienta en su vida diaria. Otro hallazgo destacado es el crecimiento acelerado de la adopción en países de ingresos medios y bajos. Allí, el ritmo de incorporación de usuarios es más de cuatro veces superior al de las economías más desarrolladas, lo que apunta a una democratización del acceso a la inteligencia artificial. Con más de 700 millones de usuarios activos por semana hacia mediados de 2025, ChatGPT se ha convertido en una de las plataformas digitales de mayor alcance global.

Este corrimiento hacia un uso más cotidiano tiene varias implicancias para las empresas y para la industria de la tecnología. Por un lado, redefine las oportunidades de negocio: el valor de la IA ya no está solo en mejorar la productividad del trabajo, sino en acompañar necesidades prácticas de la vida diaria. Para las marcas, esto significa que las estrategias de comunicación y marketing deben girar hacia la utilidad concreta. Tutoriales, guías paso a paso, consejos personalizados, traducciones y edición de textos se convierten en puntos de contacto clave para relacionarse con consumidores que buscan soluciones inmediatas y relevantes. Por otro lado, el crecimiento en mercados emergentes abre una ventana de oportunidades para campañas localizadas y productos adaptados a contextos culturales y económicos diversos.

El informe de OpenAI y el NBER también advierte que este cambio en los patrones de uso no implica la desaparición del uso profesional, sino más bien un reacomodamiento. Las tareas de oficina tradicionales siguen estando presentes y representan cerca de un tercio del total, aunque ahora comparten protagonismo con una variedad creciente de usos personales. La conclusión más clara es que ChatGPT ha dejado de ser visto como un asistente laboral de nicho para convertirse en una herramienta transversal, capaz de acompañar desde el ocio hasta la resolución de problemas técnicos, pasando por el aprendizaje y la organización de la vida cotidiana.

En conjunto, los datos sugieren que la inteligencia artificial está dejando de ser un recurso exclusivo de las empresas o los trabajadores especializados, para convertirse en un compañero digital que atraviesa fronteras, géneros y contextos socioeconómicos. Para las compañías, el desafío es interpretar este cambio y pensar en la IA no solo como una palanca de eficiencia interna, sino como un puente hacia millones de usuarios que ya la han integrado en su día a día.


Fuente: OpenAI & NBER, How People Are Using ChatGPT (Working Paper, 2025).